Muchos de nuestros alumnos de los cursos de Hazte Oír y de otros de la Universidad del Cambio nos hacen esta pregunta:
¿Cuál es la frecuencia con la que tenemos que comunicarnos con nuestros clientes o futuros clientes ?
Algunos piensan que si estamos enviándoles emails a menudo, todas las semanas, por ejemplo, estas personas pueden clasificarnos como spam, y no querer recibir nuestras ofertas.
Otras personas piensan que solo hay que enviar emails cuando envíes ofertas, y no molestar el resto del año.
Error. Y grave.
Seguramente si estás enviando a tu audiencia correos con venta persistente, te envíen a spam. Y no quieran saber nunca nada más de ti.
Y si solamente envías correos de venta, también. Imagínate. No saludas a tu vecino en años, y cuando necesitas un favor, eres todo amabilidad y azúcar.
Seguramente el vecino te enviará a…. , y tendrá razón.
La clave que muchas veces ha salvado mi negocio es la COMUNICACIÓN CONTÍNUA
Entonces, ¿Cuál es la frecuencia ideal y qué tipo de mensajes deberíamos enviar?
En uno de los webinar de dudas de La Tribu de Hazte Oír, os cuento un poco acerca de ello. (Es un seminario que hacemos habitualmente, para resolver las dudas que se presentan en el curso, o simplemente las dudas que cualquier emprendedor que pertenece al grupo nos puede hacer.)
En primer lugar, has de hacer un post, un artículo semanal, con contenido muy valioso. En él puedes explicar claves o consejos relativos a tu nicho de mercado.
No se me ocurriría hablar de recetas vegetarianas, aunque me gusten, en este blog de Hazte Oír, simplemente, porque no es mi nicho de mercado.
Así que tu primer email de la semana, será el que envíes informando que tu nuevo post ha salido y que vas a hablar de tal o cual cosa. Has de interesar a tus suscriptores, para que acudan a tu blog.
El segundo email de la semana ( y si, hablo de varios dentro de la semana), puede ser algo más personal. Y como personal me refiero a actualizar qué estás haciendo ahora, qué está sucediendo en tu vida para conseguir tus objetivos.
En mi caso, podría hablar de qué estoy realizando en mi negocio y que funciona, ya que mi nicho son emprendedores.
Si eres coach, puedes hablar de qué meditación has creado para conseguir…. o qué técnica has probado y has podido…
Creo que estos dos ejemplos pueden ayudarte a comprender qué tienes que enviar.
Y por último, un tercer email. Pero este email, no es a tu audiencia en general, sino sólo a tus clientes. Has de hacerlos sentir especiales, porque lo son, ya que han confiado en ti para invertir.
Haz que se sientan bien trabajando contigo, que se sientan apoyados y acompañados.
Como ves, mientras sean con contenido interesante, no importa enviar hasta tres … o más a la semana. Sin contar los que envíes en campañas de ventas, de lo que hablaremos en otro post.
Para ello, necesitarás de un buen autorespondedor, un programa, en el que puedas tener tus contactos segmentados por intereses, y en el que puedas programar los emails necesarios. Hay muchos en el mercado, y con diferentes precios. Puedes investigar en google.
¡Ponte las pilas! y Comienza a enviar correos a tus futuros clientes, y si algunos se dan de baja, que no te importe, será porque no les interesa lo que haces y posiblemente tampoco te comprarían.
¡Suerte!